Es un día muy importante, por eso venimos tan elegantes
con nuestros jerseys blancos.
Después de
desayunar nuestro tradicional “joyo”, vamos a izar la bandera, pero antes
cantamos “Soy cordobés”, menos mal que las mamás y papás se lo saben porque así
nos ayudan. El himno nos lo sabemos de maravilla y aunque es muy difícil lo
cantamos muy formales porque sabemos que es un acto solemne.
